La policía turca detuvo el lunes a un hombre de 40 años de edad y de origen armenio como principal sospechoso de varios ataques en los últimos meses a miembros de la comunidad armenia en el barrio estambulita de Samatya, ubicado en el distrito histórico de Fatih, y en los que una de las víctimas fue brutalmente asesinada y el resto sufrieron graves agresiones.

Según informó la prensa turca el detenido respondería al nombre de Murat Nazaryan y sería un ciudadano turco de origen armenio que viviría solo y habría cometido los crímenes para robar a sus víctimas. Aunque la investigación aún está en curso y apenas se conocen detalles de la misma, es posible que el sospechoso conociera a varias de sus víctimas o tuviera información relevante sobre ellas. Todas ellas eran mujeres de avanzada edad que vivían solas y también pertenecientes a la comunidad armenia de Estambul.

Los dos primeros asaltos se produjeron en noviembre del año pasado contra sendas ancianas que fueron atacadas en sus propias viviendas o a la misma puerta, perdiendo una de ellas un ojo en la agresión. El 28 de diciembre se producía el brutal asesinato de Maritsa Küçük, una mujer de 85 años que vivía también sola y fue acuchillada varias veces y degollada en su casa para robarle sus bienes. Hubo al menos otros dos asaltos más contra mujeres en el mismo distrito desatando la preocupación e indignación de muchos ciudadanos, lo que motivó que el 27 de enero se organizase una gran protesta en el barrio de Samatya en defensa de las víctimas.