Militantes talibanes reivindicaron el martes una serie de ataques y explosiones que pudieron escucharse a primera hora del día en la capital afgana cerca de una de las principales entradas al palacio presidencial, en lo que constituye una nueva demostración de fuerza a poco más de un año de la retirada de las tropas de la OTAN del país.

En un breve comunicado, los talibanes se atribuyeron los ataques llevados a cabo contra una de las zonas supuestamente más seguras de Kabul, incluyendo un atentado suicida y varias explosiones que sacudieron la puerta oriental del palacio del presidente Hamid Karzai.

Los atentados se iniciaron alrededor de las 6:30 de la mañana del martes y al menos ocho explosiones acompañadas de fuego de ametralladoras pudieron oírse durante unos 45 minutos en la zona, mientras una columna de humo salía de las proximidades del palacio presidencial. Los ataques han tenido un fin claramente propagandístico, ya que se produjeron cuando una veintena de periodistas esperaban en el interior del palacio al presidente Karzai para una comparecencia de prensa.

“Hoy, a las 6:30 (3:00 CET), varios mártires han atacado el palacio presidencial, el Ministerio de Defensa y el Hotel Ariana”, indicó un portavoz talibán en un comunicado, en el que se añadía “hemos traído la muerte al enemigo”.

El Hotel Ariana, ubicado a sólo cien metros del palacio presidencial de Kabul, alberga la sede de la CIA en Afganistán. Ambos edificios se encuentran en pleno centro de la ciudad en una zona altamente vigilada que incluye las sedes de varios ministerios y las embajadas extranjeras, así como el cuartel general de las tropas extranjeras lideradas por la OTAN en el país.