Un hombre que había caído en una sima fue rescatado finalmente el jueves tras grandes esfuerzos en la provincia turca de Eskişehir, tras pasar casi cuatro días atrapado en el interior.

El suceso se produjo durante la noche del domingo en una zona montañosa del distrito de Mihalgazi, en la provincia noroccidental de Eskişehir, cuando un hombre de 40 años, Ramazan Yörük, se encontraba buscando objetos arqueológicos por la zona, una práctica habitual entre los habitantes de muchas zonas rurales.

Según informó la prensa turca, el hombre al parecer cayó mientras caminaba por el área al interior de un pozo natural de 25 de profundidad, donde quedó atrapado sin posibilidad de moverse. Casado y con tres hijos, fueron unos amigos de la víctima quienes al día siguiente por la mañana se pusieron en contacto con la gendarmería turca preocupados por la desaparición de Yörük.

Ese mismo día se organizaba un gran operativo de búsqueda y rescate que finalmente localizaba al hombre a las 18:30 horas del lunes; la difícil situación de Yörük, encajado en la sima y herido, complicó seriamente los esfuerzos por liberarle, que se prolongaron varios días y en los que participaron un total de ocho equipos de 40 personas en total. Su primera petición a los rescatadores que le encontraron fue zumo de frutas, según indicaron medios de comunicación turcos.

Finalmente y tras pasar un total de 83 horas atrapado en las que estuvo sometido a vigilancia y cuidados médicos constantes, Yörük era rescatado el jueves por la mañana tras un minucioso operativo de salvamento, en el que los equipos llegaron a tener que emplear incluso pequeños explosivos para ensanchar la sima y liberar el cuerpo del hombre. Aún en estado de shock, la víctima fue trasladada en helicóptero hasta un hospital donde se recupera de la traumática experiencia.