Ankara ha mostrado su profunda preocupación por el auge de la xenofobia, el euroescepticismo y las políticas anti-inmigración entre los votantes europeos a raíz de las recientes elecciones celebradas la semana pasada al Parlamento Europeo, al tiempo que se registra un aumento de los ataques racistas en el viejo continente.
Y es que de hecho los recientes comicios europeos han visto cómo grandes partidos de extrema derecha se aupaban hasta el primer puesto como las formaciones políticas más votadas en varios países, incluyendo Reino Unido, Dinamarca o Francia, donde el Frente Nacional (FN) de Marine Le Pen ha cosechado una victoria histórica.
Entre otras medidas, el FN aboga por reducir radicalmente la inmigración legal a Francia; además quiere prohibir la reagrupación familiar entre inmigrantes, abandonar la Zona Schengen y restablecer los controles fronterizos, o dar prioridad a los franceses frente a los extranjeros a la hora de acceder a empleos y servicios como viviendas sociales. Tras su victoria en las europeas, sus líderes ya han pedido al presidente Hollande la convocatoria de elecciones anticipadas.
"Las preocupaciones sobre la creciente hostilidad hacia los extranjeros y los inmigrantes ya habían sido subrayadas (por nuestro gobierno) antes incluso de las elecciones", manifestó el Ministerio de Asuntos Exteriores (MAE) de Turquía en un comunicado difundido el miércoles, al tiempo que pedía la adopción de medidas preventivas contra la xenofobia a la luz de los resultados electorales.
"Resulta importante para el nuevo liderazgo de la UE que surja en el período post-electoral volver a convertir a la Unión Europea en un actor influyente y de prestigio en el ámbito político y económico... Esto resulta indispensable para el futuro tanto del proyecto europeo como de las relaciones entre Turquía y la UE", añadía la nota ministerial.
El MAE de Turquía mostró no obstante también su satisfacción por la elección en los recientes comicios de diputados de origen turco en varios países, lo que consideró un signo de integración que servirá como "puente de amistad" entre Turquía y los países de residencia de estos parlamentarios.
Ankara condena el atentado contra el Museo Judío en Bélgica
En otro comunicado difundido también el miércoles, el ministerio de exteriores turco expresaba su condena por el reciente atentado llevado a cabo el fin de semana contra el Museo Judío de Bruselas, capital de Bélgica y de la propia Unión Europea, donde un hombre armado y bien entrenado abrió fuego matando a tres personas y dejando a otra en muerte cerebral, en un ataque que ha sembrado el pánico entre la comunidad hebrea y reabierto los temores al regreso del anti-semitismo al viejo continente.
"Queremos confiar en que el ataque no tuviera motivaciones racistas y no tenga características anti-semitas", decía el comunicado oficial difundido el miércoles desde Ankara, en el que se ofrecían también condolencias a los familiares de las víctimas. "De no ser así, nuestras preocupaciones ante el pésimo panorama surgido de las elecciones parlamentarias europeas se incrementarán aún más", añadía el texto, que mostraba además la total disposición de las autoridades turcas ante la petición de ayuda de Bélgica para capturar al asesino.
"Con el presente comunicado, queremos enfatizar una vez más que Turquía continuará en el futuro sus esfuerzos dirigidos a prevenir cualquier tipo de intolerancia religiosa y xenofobia, que incluyen amenazas, provocaciones o violencia contra la Humanidad, tal y como ha estado haciendo en el pasado", concluía el comunicado.
0 Comentarios