Las autoridades de la provincia turca de Tokat, ubicada en la región del Mar Negro, han decidido comenzar a emplear drones (vehículos aéreos no tripulados) para evitar la práctica que muchas personas mantienen en Turquía de realizar disparos al aire con armas de fuego durante las celebraciones, especialmente en las bodas.

Esta costumbre, muy extendida sobre todo en las zonas rurales del país, acaba no en pocas ocasiones con heridos o incluso muertos de forma accidental por los disparos, por lo que la administración está tomando medidas para evitar este tipo de incidentes; tal es el caso del gobernador del distrito de Erbaa, al norte de Tokat, que ha decidido adquirir al menos un par de drones multicópteros.

Estos aparatos, que entrarán en funcionamiento el mes que viene, serán usados tanto por la policía como por las fuerzas de la gendarmería para vigilar las bodas que se celebren en la zona e impedir que se disparen pistolas o rifles que puedan causar heridos, según informaron medios turcos.

“Estamos determinados a poner fin a esto... Hasta ahora hemos llevado a cabo casi 200 registros en bodas e impuesto multas por unas 20.000 liras turcas”, declaraba a la agencia Anatolia el kaymakam –gobernador- de Erbaa, Abdulkadir Demir, añadiendo que sólo en el último mes se han confiscado más de una decena de armas -y más de una veintena de pistolas de fogueo- en bodas celebradas en el distrito, y que en lo que va de año dos personas han resultado heridas por culpa de esta tradición.

Demir explicó además que por razones también de seguridad el uso de fuegos artificiales en las bodas también está prohibido, indicando que 77 personas habían sido multadas en lo que va de año en el distrito por su uso. Además de para controlar el uso de armas de fuego en bodas, los nuevos drones podrán ser usados en otras tareas de vigilancia, como la prevención de incendios forestales.