Tres periodistas de la cadena qatarí Al-Jazeera fueron arrestados a última hora del miércoles por supuestamente hacer volar un vehículo aéreo no tripulado –popularmente conocido como “dron”- sobre varios lugares de la ciudad de París, según informaron las autoridades francesas.

“Uno de los periodistas operaba el dron, el otro grababa y un tercero observaba”, indicó a los medios un portavoz de la policía. Fuentes de la fiscalía informaron que los tres detenidos, todos ellos extranjeros de edades comprendidas entre los 34 y los 68 años, habían sido avistados por la policía mientras sobrevolaban con el aparato el Bosque de Boulogne, una enorme zona arbolada situada al oeste de la capital francesa que alberga un parque de atracciones y un zoo.

Por su parte responsables de Al-Jazeera comentaron al respecto que aún no habían recibido una notificación de las autoridades, que de acuerdo a las leyes en vigor en el país podrían imponer una multa de hasta 75.000 euros y hasta un año de prisión por hacer volar drones sin autorización (algo totalmente prohibido en Francia). Las informaciones apuntan no obstante a que este incidente no estaría relacionado con los drones avistados esta semana sobre varios puntos clave de París, y que mantienen en alerta a las fuerzas de seguridad.

Las autoridades parisinas siguen tratando de averiguar quién puede estar de los aparatos avistados el lunes y el martes por la noche en localizaciones tales como la Torre Eiffel, la Plaza de la Concordia, la Plaza de la Bastilla o la embajada de Estados Unidos, y que se sumarían a otros divisados a finales del pasado año sobrevolando un gran número de centrales nucleares y la base de submarinos atómicos de Brest. Además, sólo dos semanas después del atentado contra Charlie Hebdo, otro dron sobrevoló el Palacio del Elíseo.

Respecto a los incidentes de los últimos días, la policía gala ignora incluso si se trata de un único dron o son varios los que están siendo utilizados. Si bien responsables de seguridad apuntaron que por sus características estas pequeñas aeronaves tan sólo sirven para tomar fotografías y no pueden transportar sustancias peligrosas, el hecho de que ningún grupo o individuo se haya hecho responsable sumado a la alerta terrorista que vive Francia desde los atentados que sufrió París en enero, ha sembrado la alarma entre la población.