Al menos 1.300 personas eran interceptadas el lunes en las costas de la provincia turca de Çanakkale, al noroeste del país, cuando intentaban alcanzar por mar la vecina isla griega de Lesbos, según informó la Guardia Costera de Turquía.

En la operación, llevada a cabo simultáneamente en ocho localizaciones distintas de la provincia, participaron unos 250 gendarmes; entre los refugiados y solicitantes de asilo había sirios, afganos, iraquíes e iraníes, según informaron medios turcos, que indicaron que se identificó además en una playa el cuerpo sin vida de un refugiado. Cuatro presuntos traficantes fueron además detenidos, junto con un arma de fuego, cuatro botes y seis motores para embarcación.

Por otro lado guardacostas turcos rescataban horas antes frente a las costas del distrito de Ayvalık, en la provincia de Balıkesir, a 222 refugiados que intentaban llegar en grupos separados hasta Lesbos, cruzando el Mar Egeo a bordo de cuatro embarcaciones.

Los botes fueron interceptados justo cuando uno de ellos había volcado debido a la sobrecarga, haciendo que decenas de personas tuvieran que ser rescatadas del agua por la Guardia Costera, que los trasladó a la cercana isla de Cunda. Entre los refugiados, de nacionalidad siria, palestina, tibetana e hindú, había 65 niños y 41 mujeres, según indicaron las autoridades turcas.

Según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (IOM, por sus siglas en inglés) un total de 653.075 personas han llegado a Grecia desde enero de 2015, de las cuales 512 han fallecido ahogadas en el Egeo.