Una facción vinculada al grupo terrorista Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), los denominados Halcones por la Libertad del Kurdistán (TAK), asumió el domingo la autoría de las dos explosiones que dejaron el sábado por la noche 39 muertos y 155 heridos en el distrito de Beşiktaş, en pleno corazón de Estambul.
En un comunicado emitido el domingo, el grupo terrorista confirmó que dos de sus militantes habían muerto en el doble atentado suicida perpetrado en la noche del sábado junto al Vodafone Arena, el estadio del club de fútbol Beşiktaş, que hora y media antes había estado abarrotado con decenas de miles de hinchas. El TAK sin embargo no especificó más datos sobre ambos militantes, añadiendo que revelaría más información en los próximos días.
El comunicado emitido por la facción, una de las más extremistas y sanguinarias de todos los grupos que se agrupan bajo el paraguas común del PKK, aseguraba además que nadie en Turquía podía esperar llevar una vida pacífica mientras la actual situación persista y el líder del PKK, Abdullah Öcalan, permanezca entre rejas.
Fuentes de inteligencia citadas el domingo por la prensa turca aseguraron que al menos uno de los terroristas suicidas muertos el sábado había entrado días antes en Turquía desde la región de Siria controlada por el Partido de la Unión Democrática (PYD) y su brazo armado, las Unidades de Protección del Pueblo (YPG).
Tanto el PYD como el YPG –que en un video difundido el pasado febrero ya amenazó con llevar a cabo atentados terroristas en Turquía- son considerados por Ankara como la rama siria del propio PKK, con el que comparten de facto ideología, militantes, organización, suministros y armas, además de su veneración por Öcalan. Miembros del PKK reciben regularmente equipo y entrenamiento en zonas de Siria bajo control del PYD/YPG, desde donde se internan en territorio turco para llevar a cabo ataques en nombre del PKK o del TAK.
Fuentes de la lucha antiterrorista en Turquía consideran de hecho al TAK como una más de las muchas organizaciones fantasma tras la cual se esconde el propio PKK, que utiliza estas siglas cuando considera que sus acciones pueden tener repercusiones negativas para su imagen fuera de Turquía, especialmente si hay víctimas civiles o si emplean militantes suicidas, como es el caso del doble atentado del sábado en el distrito estambulita de Beşiktaş.
El TAK ya ha reclamado la autoría de otros atentados terroristas llevados a cabo este año en suelo turco, como el que el pasado 17 de febrero causó la muerte a 29 personas –la mayoría militares pero también civiles- en el centro de Ankara con un coche bomba, conducido por un militante suicida que anteriormente había militado en el PYD/YPG y había recibido entrenamiento en Siria.
A mediados de marzo y a sólo unos cientos de metros del anterior, otro terrorista suicida se inmolaba en un coche bomba junto a una concurrida parada de autobuses en la céntrica Plaza Kızılay de la capital turca, matando a 37 civiles: una masacre que fue nuevamente reivindicada por el TAK en respuesta a las operaciones de las fuerzas de seguridad turcas contra el PKK en el sureste de Turquía.
Muere una de las personas heridas en el atentado
La cifra de fallecidos por el doble atentado del sábado en Estambul se elevaba a primera hora del domingo a 39, después de que una mujer identificada como Selin Çelik, que se encontraba en el interior de un autobús en el momento de la explosión del coche bomba junto al estadio Vodafone Arena, falleciera a consecuencia de sus graves heridas en la unidad de cuidados intensivos.
Mientras a última hora del domingo, cazas de combate turcos bombardeaban posiciones del PKK en la región de Zap del norte de Irak y “destruían completamente” una docena de objetivos del grupo en esta zona próxima a la frontera turca, según informaron las Fuerzas Armadas Turcas en un comunicado, después de haber recibido informes de inteligencia sobre su situación.
0 Comentarios