La Federación Turca de Fútbol (TFF) y Mircea Lucescu llegaron el miércoles a un acuerdo para que el técnico rumano sea el próximo seleccionador nacional de Turquía en sustitución de Fatih Terim, que la semana pasada abandonó el puesto que ocupaba por tercera vez desde 2013 tras los últimos escándalos en los que se ha visto envuelto.

Según anunció la propia TFF en un comunicado, la ceremonia oficial para la firma del acuerdo tendrá lugar el viernes en Estambul, donde está previsto que Lucescu, que anteriormente ha entrenado a dos grandes clubes turcos como el Galatasaray y el Beşiktaş, firme por dos años con opción a renovar un tercero.

El rumano sustituye así a Terim, quien según la versión oficial presentó su renuncia el pasado 26 de julio, y después de que tanto Şenol Güneş –técnico actual del Beşiktaş- como Abdullah Avcı –que entrena al İstanbul Başakşehir- declinaran la oferta para dirigir a la selección turca, conocida en Turquía como el Milli Takım (Equipo Nacional).

Tras dirigir varios clubes locales en su país natal, Lucescu desarrolló su carrera como entrenador durante casi una década en Italia, donde estuvo al frente de equipos como el Pisa, el Brescia, el Reggiana o el Inter de Milán. En el año 200 tomó las riendas del Galatasaray turco, con el que ganó la Super Copa de la UEFA frente al Real Madrid, equipo ante el que perdieron al año siguiente en los cuartos final de la Champions. Un año después los Leones lograban el título de la Süper Lig turca, pese a lo cual, al final de la temporada Lucescu era reemplazado por el propio Fatih Terim.

Tras su salida del Galatasaray, el técnico rumano firmaba por el Beşiktaş en junio de 2002, pero después de una cadena de malos resultados Lucescu abandonó la liga turca para fichar, ya en 2004, por el Shakhtar Donetsk de Ucrania, equipo que llevó a lo más alto logrando un título de liga y el subcampeonato de la Copa, además de lograr que el club ucraniano participase por primera vez en la fase de grupos de la Champions League.

El hasta ahora técnico de la selección nacional, Fatih Terim, rompió sus lazos con la Federación la semana pasada tras una cadena de resultados decepcionantes del equipo acompañados de disputas con jugadores de renombre como Arda Turan. La gota que sin embargo colmó la paciencia de la TFF fue la reciente implicación de Terim en una pelea en un restaurante de la localidad turística de Alaçatı, en la provincia turca de İzmir, cuando el todavía seleccionador turco intervino junto con su yerno –propietario a su vez de otro restaurante en el mismo lugar- en una disputa con el propietario de un kebap cercano.

El dueño del restaurante donde ocurrieron los hechos, al parecer un antiguo amigo de Terim, ha presentado contra el técnico cargos por agresión tras la pelea, en la que cinco personas resultaron heridas. La difusión de las imágenes en redes sociales y medios de comunicación de Turquía causaron una gran polémica y dañaron gravemente la imagen de Terim y de la propia TFF, lo que llevó finalmente a ésta a tomar la decisión de romper con el apodado como İmparator.

No obstante pese a que la versión oficial difundida por la Federación fue que Terim había presentado su renuncia después de que ambas partes acordaran que era lo más adecuado en las actuales circunstancias, Terim ha asegurado que no dimitió sino que fue de hecho despedido por la TFF.