Unas 38.000 personas han sido multadas en la última semana en Turquía por violar el toque de queda contra el coronavirus impuesto por las autoridades turcas para frenar el aumento de contagios, según ha informado el Ministerio del Interior del país euroasiático.

En un comunicado, el ministerio subraya que se han tomado las medidas necesarias contra quienes incumplan el toque de queda decretado por el gobierno, después de que el 30 de noviembre el presidente turco Tayyip Erdoğan anunciase nuevas restricciones, y la ampliación de la prohibición de salir a la calle los fines de semana también a los días por semana. Además, se mantienen las restricciones de horarios para mayores de 65 y menores de 20, que no podrán usar el transporte público.

El ministerio destaca no obstante que la mayoría de los ciudadanos están cumpliendo con las medidas de confinamiento y con el toque de queda, pese a lo cual cerca de 38.000 personas han tenido que ser sancionadas entre el 1 y el 7 de diciembre. La prohibición de salir a la calle se extiende actualmente desde las 21:00 hasta las 5:00 horas todos los días de la semana, y permanecerá en vigor hasta nuevo aviso.

Sólo los trabajadores de determinados sectores -producción, suministros, salud, agricultura- están exentos de la prohibición de salir a la calle durante estas horas, mientras que tiendas de alimentación, supermercados, carnicerías, panaderías y otros establecimientos similares están autorizados a abrir de 10:00 a 17:00 horas los fines de semana. Los restaurantes podrán así mismo servir comida para llevar de 10:00 a 20:00 horas sábados y domingos.

A pesar del toque de queda, según los últimos datos sobre la pandemia de coronavirus, Turquía registró en las últimas 24 horas otros 30.402 nuevos contagios y 6.093 pacientes de COVID-19 más han tenido que comenzar a recibir tratamiento, mientras que otras 195 personas han fallecido por el virus SARS-CoV-2 elevando la cifra de muertes a casi 15.000, según datos del Ministerio de Salud.