Con los hoteles en muchas zonas de Turquía al 80-90% de su capacidad, el Ministerio del Interior ha anunciado una serie de medidas para incrementar la seguridad de cara a la llegada del Año Nuevo, mientras millones de personas se preparan para recibir al año 2023 con fiestas y celebraciones por todo el país.
Así, desde este mismo viernes y hasta el domingo 1 de enero las fuerzas de seguridad pondrán en marcha un plan especial con la participación de 490.000 efectivos, incluyendo policías y gendarmes, que serán desplegados en lugares clave, especialmente en zonas muy concurridas por el público durante estas fechas.
Además, el ministerio ha dado instrucciones a los gobernadores de las 81 provincias de Turquía para incrementar las inspecciones en lugares turísticos, mercados, centros comerciales, aeropuertos, puertos, y medios de transporte. Se redoblarán los esfuerzos para perseguir actividades ilegales, incluyendo las apuestas ilegales pero también la venta de alcohol adulterado. Habrá así mismo controles adicionales de tráfico, sobre todo en lugares muy turísticos.
Para coordinar estas y otras medidas especiales, el Ministerio del Interior de Turquía ha establecido un centro de control único durante Nochevieja y Año Nuevo. Este será el segundo año que el país celebra la llegada de un año nuevo sin restricciones por la pandemia de coronavirus, al contrario de lo ocurrido con la llegada de 2021, cuando el gobierno turco declaró un toque de queda nocturno durante 4 días y prohibió las celebraciones en la calle.
Coincidiendo con el incremento de las medidas de seguridad de cara al Año Nuevo, un terrorista de nacionalidad iraquí vinculado al Daesh era detenido ayer por la policía en la provincia de Afyonkarahisar, al oeste de Turquía, con planes para cometer atentados contra lugares de culto cristianos y judíos, así como en centros comerciales y de ocio, y representaciones diplomáticas extranjeras.
0 Comentarios