Las autodenominadas Fuerzas de Defensa del Pueblo (HPG), considerado el brazo militar de la organización terrorista Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), reivindicaron el miércoles el asesinato de dos oficiales de policía en una localidad fronteriza de la provincia de Şanlıurfa, al sureste de Turquía, la misma donde el lunes se produjo el mortífero atentado que acabó con la vida de 32 personas.

En un comunicado publicado en su página web, el HPG anunció que había llevado a cabo una “acción de castigo” añadiendo que ésta había sido “una venganza por la masacre de Suruç”, acusando a los policías de cooperar con los militantes del grupo terrorista Estado Islámico (IS). 

El gobernador de Şanlıurfa, İzettin Küçük, confirmó el miércoles que dos policías habían sido hallados muertos en su propio domicilio en el distrito fronterizo de Ceylanpınar, situado a unos 120 kilómetros al este de Suruç. Los dos agentes, que trabajaban en los departamentos locales de lucha anti-terrorista y antidisturbios, fueron encontrados con sendos disparos en la cabeza en la vivienda que ambos compartían en el barrio de Bahcelievler, a las afueras de la ciudad.

Antes de que el comunicado del PKK se hiciera público, Küçük había informado a los medios que se estaba investigando el incidente pero que no se trabajaba por el momento con la hipótesis de un atentado terrorista. Un vecino de los dos policías declaró a los periodistas que la puerta del domicilio estaba cerrada por dentro y que sólo pudieron entrar con la ayuda de un cerrajero. “Vi a los policías muertos en sus camas en dos habitaciones separadas. La casa no estaba desordenada. No oímos ningún disparo. No entendemos cómo pudo ocurrir”, afirmó el testigo.

Por otro lado la prensa turca informaba el miércoles que el Ministerio del Interior había emitido una orden remitida a las oficinas del gobernador de las 81 provincias del país en la que se anunciaba la cancelación de todas las vacaciones y permisos de todo el personal de policía y de seguridad, a partir del 27 de julio y hasta nuevo aviso.