El presidente turco Tayyip Erdoğan anunció ayer una serie de medidas para reducir la factura de la luz tanto para los consumidores como para las empresas, ante la escalada de los precios de la electricidad, que junto con los alimentos está contribuyendo a disparar la inflación en Turquía.

Durante una comparecencia televisada tras una reunión mantenida con su gabinete de ministros, Erdoğan anunció que se procederá a un reajuste para establecer un nuevo límite a partir del cual se aplican mayores costes de electricidad para los hogares que más consumen; además, unos 4 millones de hogares en Turquía con pocos recursos recibirán subsidios del Estado para ayudarles a pagar las facturas tanto de la luz como del gas.

El presidente turco señaló en su comparecencia que muchas pequeñas empresas y negocios podrán beneficiarse también del nuevo reajuste en los precios de la electricidad; además, Erdoğan anunció también que las organizaciones y asociaciones civiles ya no estarán obligadas a pagar tarifas de electricidad similares a las empresas.

“Continuamos apoyando a los hogares con (las facturas de) la electricidad y el gas natural. Estamos prestando atención a lo que dice nuestro pueblo, y encontrando soluciones a sus problemas”, dijo al anunciar las nuevas medidas para reducir la factura de la luz. Erdoğan volvió a asegurar una vez más que la elevada inflación es “temporal”, y que su gobierno conseguirá reducirla. “Nuestro problema más importante es la alta inflación. Confió en que la venceremos y la veremos bajar cada mes”, concluyó.