Los conductores turcos podrían enfrentarse a multas por infracciones de tráfico más severas, si prospera una propuesta de ley presentada ante el parlamento por dos diputados del partido gobernante AKP (Partido de la Justicia y el Desarrollo).

Con el objetivo de “evitar muertes y garantizar la seguridad del tráfico”, la propuesta –que tiene bastantes visos de aprobarse dada la mayoría que tiene el AKP en la cámara- prevé por ejemplo imponer multas de 235 liras –unos 34 euros- a los conductores que se salten un semáforo en rojo, llegando a retirársele el permiso de conducir durante un mes si la misma infracción se repite tres veces en un año. Si aun así volviera a reincidir, se le retiraría el permiso por dos meses.

En el caso de las infracciones por uso de bocinas o luces no autorizados, la sanción podría alcanzar las 1.002 liras (unos 146 euros), no pudiendo el vehículo volver a circular hasta que dichos elementos no hubiesen sido desinstalados.

Si un conductor es multado tres veces por este motivo, perderá el permiso de conducir durante 15 días. Además todos aquellos conductores que vean suspendido su permiso al menos en dos ocasiones, deberán pasar por un examen psicotécnico y superar una evaluación psiquiátrica para poder recuperarlo.

Por otro lado aquellos que utilicen tubos de escape ruidosos o trucados, que conduzcan en dirección contraria, o que realicen adelantamientos indebidos o peligrosos a otros vehículos, serán multados igualmente con 1.002 liras.

La sanción alcanzará las 2.018 liras turcas –unos 295 euros- si un conductor usa un vehículo que por su antigüedad debe ser retirado de la circulación, mientras que será de 5.010 liras –unos 730 euros- para los conductores que utilicen un vehículo para realizar maniobras, derrapes o giros peligrosos, que además perderán su permiso de conducir y de circulación durante dos meses.

Si un conductor es sancionado dos veces en un plazo de 5 años realizando este tipo de maniobras peligrosas, perderá definitivamente su permiso de conducir.

Por último la nueva propuesta de ley también estipula multas de 235 liras por hablar por el teléfono móvil conduciendo.