Hasta un 70% de los edificios actualmente existentes en Estambul no son resistentes a terremotos, y unos 90.000 deberían ser derribados y construidos de nuevo, según ha afirmado Okan Tüysüz, un experto geocientífico de la Universidad Técnica de Estambul. “La primera regla en un terremoto es reducir el riesgo. Si sólo una persona viviera en cada uno de estos edificios, se salvarían 90.000 vidas con esta medida”, señaló. Otro experto, Hüseyin Alan, advierte que 24 ciudades de Turquía están construidas sobre líneas de falla, algo que debería prohibirse por ley, al igual que las construcciones en los cauces de ríos o en zonas de riesgo de tsunami. “En Estambul hay incluso señales de alerta de tsunami... Pero en esas zonas de riesgo, hay edificios que no deberían estar ahí” subrayó.