Un tribunal de Turquía ha condenado a 10 meses de prisión a la famosa cantante turca Gülşen por unas polémicas declaraciones que hizo durante un concierto el año pasado, en las que se refirió a los estudiantes de escuelas religiosas como “pervertidos”. Gülşen fue detenida en agosto del año pasado después de que se hiciese viral el video, grabado en el mes de abril, en el que hacía un comentario jocoso diciendo que un miembro de su banda era un “pervertido” porque había asistido a un colegio religioso.
En su declaración, la cantante alegó que se trataba de una broma entre compañeros, y que su comentario no fue hecho al público a los medios. Tras pasar unos días en prisión, la cantante fue puesta en libertad pero bajo un arresto domiciliario, que fue levantado posteriormente, teniendo que pagar una fuerte fianza para poder salir del país. Al haber sido sentenciada ahora a una pena inferior a 2 años, su condena quedará en suspenso y la cantante -que ha pedido disculpas por el incidente- no tendrá que entrar en prisión si no comete otro delito durante los próximos 5 años.
0 Comentarios