Una gran explosión ocurrida en la mañana del lunes en el sur de Chipre causó al menos 12 muertos y decenas de heridos devastando una extensa zona y causando daños en decenas de kilómetros a la redonda.

La fuerte detonación se produjo poco antes de las 6:00 de la mañana hora local en un depósito militar de municiones situado en la parte grecochipriota de la isla, junto a la base naval de Zygi y la base militar de Evangelos Florakis, la principal de la isla. Al parecer un incendio alcanzó el depósito, que contenía numerosos explosivos y municiones requisados de un barco que transportaba armas ilegalmente a Irán. El navío en cuestión, el "Monchegorsk", fue interceptado en enero de 2009 cuando transportaba bajo bandera chipriota un cargamento que según las autoridades chipriotas violaba las sanciones impuestas por la ONU sobre el régimen iraní.

Las autoridades grecochipriotas informaron de que la gran explosión causó numerosos daños en la base y en los alrededores, y aunque el balance es provisional y resulta difícil aún cuantificar el número de víctimas, por ahora las cifras hablan de al menos una docena de fallecidos y una treintena de heridos.

La televisión chipriota informó -citando fuentes policiales- que había un total de 98 contenedores de explosivos en el depósito y que dos de ellos explotaron a causa del fuego. Otros medios locales indicaron que entre los muertos habría dos marineros de la base naval, dos soldados y cinco bomberos.

Testigos en la zona hablan de que la explosión afectó a un gran área y que la zona se asemeja a un paisaje bombardeado cubierto de escombros, causando además incendios en otros lugares próximos. Los hospitales han hecho llamamientos de emergencia a la población para que done sangre, y la magnitud de la explosión fue tal que afectó incluso a un centro turístico situado a tres kilómetros de distancia, donde hubo roturas de puertas y ventanas.

La deflagración causó también importantes daños en la cercana central eléctrica de Vassilikou, la mayor de Chipre y que proporciona alrededor de la mitad del suministro eléctrico del sur de la isla, causando un apagón masivo y obligando a las autoridades a pedir a los ciudadanos que limiten al máximo el consumo energético, incluyendo el uso del aire acondicionado.

"No podemos evaluar la extensión de los daños, pero se trata de un desastre de proporciones bíblicas", declaró a la prensa un responsable del gobierno grecochipriota.