Los robos y asaltos en Turquía se redujeron este año un 26,6% en comparación con hace tres años, según datos dados a conocer esta semana por el ministro turco del Interior, Süleyman Soylu.

"En los primeros ocho meses de este año, la media diaria de robos en casas se redujo a 176", dijo el ministro el lunes, añadiendo que en el mismo período del año 2016 se producían 240 asaltos diarios a viviendas.

Soylu destacó que en general los robos han descendido en todas las grandes ciudades del país en los últimos años; así por ejemplo han bajado un 38% en la mayor ciudad del país, Estambul, mientras que en la capital -Ankara- han caído un 79%, y un 56% en İzmir (Esmirna), la tercera ciudad más importante de Turquía.

Los guardias de barrio, clave contra los ladrones

Buena parte de este descenso generalizado de los robos se debe, según apuntó el ministro, a la recuperación precisamente en 2016 de la figura del guardia de barrio para incrementar la seguridad. Los llamados bekçi tienen autoridad para portar armas y su principal cometido es vigilar los mercados y tiendas, además de patrullar por la noche los barrios.

"En todo el país se han reclutado 19.600 nuevos guardias de barrio", aseguró Soylu, para anunciar a continuación que esta cifra se incrementará pronto hasta los 30.000 efectivos.

Más de 300.000 agentes en servicio

Además de ofrecer cifras sobre el importante descenso de los robos en Turquía, el ministro también confirmó que se han cubierto todas las plazas vacantes tras los despidos y arrestos que se produjeron en los últimos años en las fuerzas de seguridad y la policía, especialmente a raíz del fallido golpe de Estado. "El número de personal activo en las fuerzas de seguridad es ahora de 306.000", concluyó Soylu.