Seis ciudadanos turcos que permanecían secuestrados en Libia por fuerzas leales al general Khalifa Haftar fueron puestos en libertad el lunes, según confirmó un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía, después de que Ankara hubiese amenazado al hombre fuerte del país con pagar “un gran precio” si no eran liberados de inmediato.

Según reveló a la prensa el portavoz de exteriores turco Hami Aksoy, los seis marineros turcos ya están libres pero han decidido por propia voluntad continuar trabajando en el país, por lo que habrían regresado al barco donde trabajaban, propiedad de una compañía libia.

El gobierno turco advirtió el domingo a las fuerzas de Haftar que se convertirían en objetivos legítimos de un ataque militar si no ponían en libertad de inmediato a los seis marineros turcos. “Retener a seis ciudadanos turcos en Libia por parte de milicias armadas ilegales leales a Haftar es un acto de bandidaje, de piratería”, denunció el Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía en un comunicado.

El lunes el vicepresidente turco Fuat Oktay advirtió al general libio que pagaría “un gran precio” si los seis marineros retenidos no eran liberados de inmediato. “Si nuestros ciudadanos no son liberados inmediatamente, los responsables se convertirán en un objetivo legítimo y las consecuencias serán severas”, aseguró Oktay.

Turquía amenaza al general libio con represalias inmediatas

Por su parte el ministro de Defensa Hulusi Akar, de viaje oficial en Japón acompañando al presidente turco Tayyip Erdoğan para la cumbre del G-20, afirmó el domingo que cualquier acto de agresión por parte de las fuerzas de Haftar sería respondido con una represalia inmediata y contundente.

“El precio de las acciones hostiles o de los ataques será grande, serán respondidos de la forma más efectiva y dura posible”, dijo Akar en declaraciones a medios turcos desde la ciudad japonesa de Osaka.

Sus palabras se produjeron en respuesta a las declaraciones hechas el pasado viernes por el portavoz del gobierno de Haftar, Ahmed al-Mismari, quien anunció la prohibición en el territorio controlado por Haftar –que domina la mayor parte del país- de todos los vuelos comerciales entre Libia y Turquía, y ordenó a sus fuerza tratar a cualquier barco y avión comercial turco como un objetivo hostil.

El domingo la embajada de la República Turca en Trípoli publicó en su web un aviso para todos los ciudadanos turcos en Libia, a los que recomendaba extremar su seguridad y evitar las zonas de conflicto en torno a la capital, que permanece cercada desde que el pasado mes de abril las fuerzas de Haftar y de su autoproclamado Ejército Nacional Libio lanzaran por sorpresa una ofensiva para hacerse con el control de Trípoli, en poder del gobierno reconocido por la ONU.