Suecia y Finlandia han dado pasos contra las actividades del grupo terrorista PKK en estos países, pero no han hecho lo suficiente para que Turquía apruebe su entrada en la OTAN, advirtió ayer Ibrahim Kalın, portavoz del presidente turco Tayyip Erdoğan, tras la reunión tripartita entre los tres países en Bruselas, recordando además que las negociaciones se suspendieron tras la quema del Corán en Estocolmo y que Ankara decidió retomarlas por una petición personal del secretario general de la OTAN al presidente turco. “Hemos dicho que deben darse pasos contra la financiación y la propaganda del terrorismo… Queremos que el pacto firmado en Madrid sea plenamente implementado. Cuando se haga, la adhesión de ambos países a la OTAN procederá positivamente”, sentenció Kalın.