Un importante éxito con respecto a la puesta en marcha de las negociaciones exploratorias iniciadas hace 19 años entre Turquía y Grecia es el estricto apagón informativo impuesto a los medios. Ambas partes han sido siempre muy precavidas para no filtrar los temas discutidos en las reuniones a puerta cerrada para así mitigar la presión pública sobre los diplomáticos.
Lo mismo ha ocurrido el 25 de enero cuando las delegaciones de los dos países se reunieron para la 61ª ronda de negociaciones exploratorias con la tarea de resolver sus profundas diferencias con respecto al Mar Egeo. Según fuentes diplomáticas, ambas partes estuvieron de acuerdo en continuar las conversaciones y celebrar la 62ª ronda en Atenas.
Un detalle interesante fue la participación del portavoz y asesor jefe en política exterior del Presidente Recep Tayyip Erdoğan, İbrahim Kalın. Parece que su asistencia fue una decisión tomada en el último minuto durante una reunión organizada por Erdoğan a última hora del 23 de enero con la participación de los ministros de defensa y de exteriores, así como de oficiales de alto rango de la Armada.
Para los observadores internacionales, la participación de Kalın fue una señal positiva porque ilustró la importancia que Ankara ha concedido a la reanudación de las conversaciones directas entre Turquía y Grecia. Están también contentos de que Turquía y Grecia vayan a continuar el proceso con el mecanismo de desescalada de la OTAN.
Los Estados Unidos y la Unión Europea han dado también la bienvenida a la reanudación de las conversaciones en sendos comunicados emitidos por separado a última hora del 25 de enero, con el antiguo portavoz del Departamento de Estado Ned Price diciendo también que su gobierno ha dado la bienvenida a “el compromiso de ambos gobiernos con este proceso”. Añadió que “apoyamos todos los esfuerzos para reducir las tensiones en el Mediterráneo Oriental”.
Josep Borrell, el alto representante para la seguridad y la política exterior de la Unión Europea, así como el ministro de exteriores alemán Heiko Maas, también han elogiado a Turquía y Grecia por iniciar las negociaciones.
En este punto, resulta crucial para Ankara y Atenas implicarse en el proceso de forma más comprometida. Para ello, deben escuchar a aquellos que obtuvieron mucha experiencia lidiando con estas negociaciones en el pasado, como por ejemplo el antiguo primer ministro y ministro de exteriores de Grecia, Yorgos Papandreu.
En una entrevista con la cadena privada de televisión NTV, Papandreu explicó que los dos países estuvieron muy cerca de anunciar un acuerdo para acudir a la Corte Internacional de Justicia para establecer sus fronteras marítimas. Pidió a ambos países que den pasos concretos para mantener la confianza mutua y pensar cómo la cooperación entre Turquía y Grecia cosechará importantes resultados para toda la región.
“Deberíamos ser capaces de demostrar que podemos resultar ser una fuerza de paz y cooperación en nuestra región cuando trabajamos juntos. Pero si no nos esforzamos, entonces nos convertiremos en parte de problemas mucho más complicados. ¿Qué escogeremos?”, se preguntó Papandreu. “Creo que deberíamos ponernos del lado de la legislación internacional. La diplomacia no debería estar militarizada, y las acciones unilaterales deberían ser evitadas. Cuando hagamos esto, no sólo nuestros dos países, sino todas las naciones del Mediterráneo y de la UE se verán fortalecidas”.
Los problemas son profundos y difíciles de resolver. Pero como Papandreu subraya acertadamente, las cosas podrían volverse mucho más peligrosas y explosivas si Turquía y Grecia no consiguen abordar sus problemas de forma directa. En última instancia, las conversaciones técnicas deben ser respaldadas por los políticos de ambos países con un nuevo impulso a las negociaciones de gobierno a gobierno.
Artículo traducido del original publicado el 27-01-2021 en la edición internacional del diario turco Hürriyet.
0 Comentarios